Resumen:
Becca Fitzpatrick nació el 3 de Febrero de 1979. Es una escritora estadounidense conocida por haber escrito uno de los best sellers del New York Times: Hush, Hush. Escribe literatura para jóvenes adultos y usa con maestría el romance y los elementos fantásticos para narrar sus novelas.Se crió en Centerville, Utah. De niña comenzó a escribir con sus hermanas historias de misterio y aventuras. Quería ser espía o una escritora de éxito. Pero luego estudió Ciencias de la Salud, y se graduó en la Universidad Brigham Young con su licenciatura, en abril de 2001. Trabajó como secretaria, maestra y contadora en una escuela secundaria en Provo. Entonces lo abandonó para dedicarse a su gran pasión: escribir.En febrero de 2003, su marido Justin, un nativo de Filadelfia, la inscribió en una clase de escritura creativa cuando cumplió 24 años. Becca declaró: "Ese día me fui de la niña que escribió las historias diarias en la intimidad de su diario, a la niña que escribió las historias y las compartió con la gente fuera de los mundos en su cabeza. Fue también en esa categoría que empecé a escribir Hush, Hush". Acerca del regalo de Justin también podemos encontrar una referencia en la dedicatoria de su primer tomo de su saga. La dedicatoria reza: "Para Heather, Christian y Michael. Nuestra infancia no era nada sin imaginación. Y a Justin. Gracias por no elegir la clase de cocina japonesa. Te quiero"Poco después de terminar de escribir la saga Hush, Hush la autora anunció estar escribiendo una nueva historia: Black Ice.
Vive con su madre y su hijo en colorado.
Becca:
Mi amor por contar cuentos empezó en jardín de infantes. No era gran fan del jardín de infantes. Incluso voy tan lejos como para decir que lo odiaba. Mi hermana mayor, Heather, asistió a tercer grado en la misma escuela primaria en Centerville, Utah, y compartió mis sentimientos hacia la escuela. No era que nosotras odiábamos la escuela tanto como odiábamos una buena parte de los chicos que iban allí: Piensen en pequeñas niñas crueles. A la noche, cuando teníamos que estar durmiendo, Heather y yo hacíamos nuevos episodios de un cuento llamado "Las aventuras del bus". Generalmente, las historias eran cuentos morbosos de nosotras observando a todos esos niños crueles en el bus de la escuela, y conduciéndolo a un acantilado. (Siempre sacábamos al conductor del bus porque nos caía bien)Un verano después de entrar a segundo grado, mi familia se mudó a North Platte, Nebraska, y yo me reincorporé a las clases. También descubrí a Nancy Drew y Trixie Belden. Heather y yo escondíamos linternas debajo de nuestras camas y pasábamos las noches leyendo sobre las misteriosas y aterradoras aventuras de nuestra detective favorita. Entonces Heather creció y necesitó su propia habitación, y yo me mudé con mi hermana pequeña, Christian, quien me introdujo a Roald Dahl. Amaba más que nunca los libros, y me encontré a mí misma dividida entre el loco mundo imaginario de Roald Dahl, el escalofriante mundo de Nancy Drew y la aventura histórica de los libros de la "Pequeña Casa en la Pradera" (the Little House on the Prairie)
Lo esencial vino en tercer grado cuando miré "Romancing the Stone" con Michael Douglas y Kathleen Turner. No había vuelta atrás: sabía que quería ser una autora. Por supuesto, pensé que todos los autores volaban a Colombia a rescatar a sus hermanas de los Chicos Malos, cazaban tesoros, y se enamoraban del sexy y peligroso chico en botas de cocodrilo, mejor conocido como Michael Douglas.
Tengo un montón de recuerdos vívidos de mi años en la escuela secundaria, la cual probablemente explica por qué escribo "YA". Viajé por todo el país, toqué el clarinete en la banda de la escuela y fui miembro de VICA y la Sociedad Nacional Honoraria (National Honor Society). Les dejaré decir que yo era una nerd. En mi segundo año, un amigo me chantajeó para hacer una prueba para el equipo de baloncesto, y todavía recuerdo al entrenador diciéndome (entre dientes) que debido al increíblemente bajo número de niñas que lo intentaron ese año... Sobreviví al corte. Todos lo hicieron. Creo que él realmente pensaba que yo codiciaba un puesto en el equipo. La verdad es que yo odiaba cada minuto de esas prácticas de tres horas. Y hasta la fecha, me sigue molestando que el entrenador me haya dicho que parecía que estaba bailando cuando estaba en la cancha. Entrenador: Se llama arrastrar los pies. Por eso, me iba mejor en los estudios que en los deportes, y me gradué como mejor estudiante de mi clase en 1997.
Siempre me aferré a mi sueño de escribir, pero pasé por una fase en la universidad donde yo quería ser una espía. Aseché la página web de la CIA y la llené de al menos una docena de solicitudes. Pensaba que ser una espía era peligroso y sexy. Yo no quería ser la chica que consiguió un titulo, solo para sentar la cabeza y hacer las cosas de la casa... como contestar llamadas de tele-comerciales y elegir entre el español o la mariquita roja para las paredes de la cocina.
En diciembre del 2000, me casé con mi esposo, Justin. En Abril de 2001, me gradué en la Universidad Brigham Young con una licenciatura en Ciencias de la Salud y trabajé como sectretaria-barra-maestra-barra-contadora en una escuela secundaria alternativa en Provo, Utah. Me encantaban los estudiantes de esa escuela, pero tener la llamada del director los sábados para operar la fotocopiadora era otro tema. En Febrero de 2003, mi esposo me sorprendió cuando me inscribió en una clase de escritura por mi 24 cumpleaños. Ese día me fui de la niña que escribió las historias diarias en la intimidad de su diario, a la niña que escribió las historias y los compartió con la gente fuera de los mundos en su cabeza. Fue también en esa categoría que empecé a escribir Hush, Hush.
Cinco años, un bebé y un translado a Colorado después, tuve un libro, y era casi tan sexy y peligroso como la vida de espía que siempre había soñado.
En Junio de 2008 encontré a mi agente, Catherine Drayton, y en Septiembre de 2008 vendió el libro a Simon & Schuster.
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